83 segundos
César G. Antón – Editorial Minotauro – 83 segundos
Me encantan este tipo de guiones. Ciencia ficción costumbrista.
Nada de láseres, extraterrestres, naves con hipervelocidad o lejanos planetas con tecnología futurista (esto también me encanta, por cierto). Y mucho de personajes normales con vidas normales, casi siempre sombrías, casi siempre aburridas. Y llega un día en que todo cambia.
Novela que no escapa a la estructura del camino del héroe (Campbell): don nadie frustrado con la vida que se encuentra con una decisión/oferta/casualidad que le obliga a ser protagonista de algo que no quiere, cae en los infiernos y renace como un héroe tras múltiples aventuras que le hacen darse cuenta de que su papel en la vida era mucho más importante de lo que jamás hubiera querido.
Pues bien, esta novela, además, recorre este camino de Víctor Piñol de forma intensa, interesante, adictiva y muy novedosa. Trata de lo importante de las decisiones (de tomarlas o de no tomarlas y de cuándo y por qué tomarlas), trata del tiempo (de lo importante que es tener consciencia de que el tiempo se bifurca cada vez que decidimos) y trata de la evolución de la personalidad y los objetivos de cada uno en la vida (la insalvable diferencia entre unos y otros desde que somos jóvenes hasta que somos mayores).
83 segundos teje una complcada red de decisiones, tiempos y personalidades alrededor de Víctor, en la que además de ser protagonista, es muchas veces protagonista. Esto es lo más atractivo de la novela. Mucho más que por qué ocurre o por qué le ocurre a él.
Esto y el costumbrismo. La mezcla entre lo consuetudinario y lo fantástico es maravillosa. No le quita un ápice de interés ni de ritmo. Otra novela que será difícil que no acabe en algún formato en alguna pantalla.